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Descubriendo los tejidos artesanales del Valle de Zaquencipa
Canasto
Tobia
En muisca:
Los canastos boyacenses son piezas artesanales que destacan tanto por su funcionalidad como por su estética. Estos canastos, fabricados con fibras naturales, forman parte de la tradición campesina de la región andina de Colombia, específicamente en el departamento de Boyacá. Han sido utilizados por generaciones en actividades cotidianas como el transporte de alimentos, herramientas agrícolas y productos de mercado, pero también como elementos decorativos y representativos del saber ancestral.
Historia y materiales
Los canastos en Boyacá tienen una larga tradición que se remonta a tiempos prehispánicos, donde los pueblos indígenas ya dominaban la técnica del tejido con fibras naturales. El uso de materiales como el mimbre, el fique, el bejuco, la uña de gato y las cañas ha sido clave en la fabricación de estos objetos. El conocimiento de estas técnicas ha pasado de generación en generación, manteniéndose vigente hasta hoy y siendo uno de los ejemplos más importantes de la artesanía rural boyacense.
El fique, fibra extraída de la planta del mismo nombre, es uno de los materiales más utilizados en la elaboración de canastos, por su resistencia y disponibilidad en la región. Otras fibras como el bejuco o el mimbre también se emplean, proporcionando una mayor versatilidad en los diseños y usos de estos cestos.
Tipos de canastos
En Boyacá, se pueden encontrar diversos tipos de canastos que varían en tamaño, forma y uso. Entre los más comunes se encuentran:
- Canasto de boca estrecha: Utilizado principalmente para el almacenamiento y transporte de productos agrícolas, como papa, maíz y otros tubérculos. Su diseño con una boca más pequeña permite mantener los productos seguros durante su transporte.
- Canasto de boca ancha: Ideal para transportar frutas, hortalizas y otros productos del campo. Su amplia apertura facilita el acceso a su contenido, siendo comúnmente utilizado en las plazas de mercado de los pueblos boyacenses.
- Cestas decorativas: En algunas comunidades, los canastos se han adaptado con fines más decorativos, aprovechando el conocimiento tradicional para crear piezas ornamentales que embellecen los hogares.
Técnica de elaboración
El proceso de creación de un canasto boyacense es completamente artesanal. Comienza con la recolección de las fibras naturales, que luego se preparan para el tejido. Este se realiza en forma de espiral, desde la base hasta la boca del canasto, empleando diferentes técnicas de entrelazado que dan como resultado una estructura fuerte y duradera. Los canastos grandes, destinados al transporte de productos pesados, requieren una técnica más robusta, mientras que los más pequeños o decorativos pueden incorporar patrones intrincados y detalles más finos.
El proceso de tejido es meticuloso, y en muchas familias campesinas se considera una habilidad fundamental, transmitida a lo largo de generaciones. Cada región dentro de Boyacá tiene su propio estilo y técnicas particulares, lo que da lugar a una rica diversidad de formas y tamaños.
Significado cultural
Más allá de su uso práctico, los canastos boyacenses tienen un significado cultural profundo. Representan la conexión entre la tierra y las tradiciones campesinas, ya que su creación y uso están intrínsecamente ligados a la agricultura y al sustento diario. Además, la preservación de estas técnicas artesanales refuerza la identidad local y promueve el reconocimiento del trabajo manual como parte esencial de la economía regional.
Hoy en día, aunque el uso de canastos ha sido desplazado en gran parte por productos industriales, siguen siendo un símbolo de la artesanía boyacense y de las prácticas sostenibles. Los canastos no solo son útiles, sino que también destacan como productos ecológicos, hechos con materiales naturales y procesos que respetan el medio ambiente.